Mujeres, la
fuerza de cambio en India.
Cuando vas a India (sobre todo se observa en zonas rurales)
es muy llamativa la fuerza de la mujer. Son
mujeres con alma, con sonrisa, con color, pero “invisibles” a parte de su
entorno. Son mujeres con muchísimas responsabilidades dentro de un ambiente masculinizado y desigual: mantenimiento de la casa, crianza de los hijos, atención al marido, búsqueda
de sustento para la familia…
La mayoría de mujeres en la India trabajan y contribuyen a la
economía de una forma u otra, pero mucho de su trabajo no se documenta ni se
contabiliza en las estadísticas oficiales. Se estima que el 95% de mujeres
trabajan en el sector informal de la economía y su trabajo es inseguro,
irregular y normalmente no está reconocido. Las mujeres acostumbran a realizar
trabajos en el sector agrícola, venta ambulante, oficios tradicionales y el
servicio doméstico. En las zonas rurales, ellas representan el 40% de la mano
de obra agrícola a causa de la emigración de los maridos a las ciudades.
Sin embargo, a pesar de la feminización de la agricultura india y
la incorporación de la mujer al mundo laboral, ésta no goza de ningún tipo de
independencia económica. La mujer india debe entregar a su marido los
beneficios obtenidos trabajando para que él los administre a su gusto.
Históricamente, la sociedad hindú ha considerado que la mujer no podía heredar
ni poseer propiedades, por lo que dependía completamente de la benevolencia de
su padre o marido. A pesar de que ha habido avances legales sobre la propiedad
individual de la mujer, muchas de estas prácticas siguen ejerciéndose en las
zonas rurales.
En todos los aspectos de la vida, incluida la educación, se
prioriza a los niños frente a las niñas. Dado que la niña será mantenida por
otro hombre, su formación resulta innecesaria, y queda relegada a las tareas
del hogar. Así, desde pequeña, la niña deberá ayudar a su madre con las tareas
domésticas: lavando platos, cuidando a sus hermanos y limpiando. En las
profesiones que requieren calificaciones, como los médicos o ingenieros, existe
una gran masculinización y las diferencias entre género son evidentes.
La escasa atención a la salud de las mujeres en la India, sobre
todo en las zonas rurales, provoca una peor cobertura sanitaria de este
colectivo. Desde la infancia, una niña es peor alimentada que un niño. Esto
produce altos índices de desnutrición y mortalidad. Además, están obligadas a
trabajar en el campo y en el hogar. En muchas ocasiones, las adolescentes se
enfrentan a múltiples embarazos cuando su sistema reproductivo todavía no está
preparado y no siguen ningún tipo de seguimiento o control médico. Por ello,
una de las principales causas de la mortalidad femenina son las complicaciones
durante el embarazo y el parto a causa de las anemias, hemorragias, hipertensión,
infecciones por falta de higiene y la práctica de abortos en malas condiciones.
Por otro lado, las mujeres no cuentan con ningún tipo de poder ni
de derechos dentro de la pareja. Esto les impide controlar sus relaciones
sexuales y las sitúa en una posición de mayor vulnerabilidad de contraer
infecciones por transmisión sexual como el VIH/SIDA. A menudo, son los hombres
quienes toman la mayoría de las decisiones y muchas infecciones ocurren dentro
del matrimonio como resultado de las infidelidades del marido. El principal
foco de contagio son las grandes ciudades indias donde muchos hombres acuden en
busca de trabajo. Allí mantienen relaciones con otras mujeres sin protección.
Por otro lado, contraer matrimonio a una edad temprana aumenta el riesgo de
infección de muchas jóvenes que se ven obligadas a casarse y a mantener
relaciones sexuales. La India es el país del mundo donde existen más casos de
personas con VIH/SIDA, con casi seis millones de personas infectadas, de las
cuales y, según datos de ONUSIDA (2008), el 39% son mujeres.
Frente a todo ello, es cierto que la India avanza a nivel legislativo.
En las últimas décadas se han dado avances y reformas para mejorar
la normativa relacionada con la mujer. En este sentido, el gobierno indio ha
promulgado varias legislaciones específicas encaminadas a proteger a las
mujeres de la discriminación social, la violencia o prevenir los problemas
derivados de la consecución de algunas prácticas tradicionales como los
matrimonios infantiles, la dote o la violación sexual, etc.
Os invito a conocer el empoderamiento de la mujer India a través de
·
La Exposición
Mujeres, la fuerza de cambio en India.
De la mano de la
Fundación Vicente Ferrer
La fuerza del cambio recorrerá España hasta el mes de diciembre de 2012
·
“La India rural está muy cerca. Allí, el pago de la
dote al marido sigue vigente, aunque es ilegal”.
·
“Allí, 50 millones de niñas han desaparecido a causa
de los abortos selectivos y los infanticidios femeninos”.
·
“Allí, las mujeres son las principales productoras de
alimentos y, sin embargo, en la mayoría de los casos, la propiedad de la tierra
continúa estando a nombre de los hombres”.
·
“Allí es donde la
Fundación Vicente Ferrer trabaja desde hace más de 40 años”.
La India rural ha
llegado de la mano de siete mujeres que participan en el
Programa de Desarrollo Integral de la Fundación. Ellas nos cuentan su historia
de superación a través de las fotografías de Albert Uriach. Su testimonio está
viajando por toda España para difundir un mensaje: el cambio es posible, cada persona es protagonista del cambio. También tú.
Esta exposición está situada
dentro de un camión indio que incluye fotografías, maquetas, juegos
interactivos… ¡y mucho más!.
La tendremos en Murcia
del 8 al 12 de Noviembre. ¡Disfrutadla!