martes, 2 de octubre de 2012


Mujeres, la fuerza de cambio en India. 

Cuando vas a India (sobre todo se observa en zonas rurales) es muy llamativa la fuerza de la mujer.  Son mujeres con alma, con sonrisa, con color, pero “invisibles” a parte de su entorno. Son mujeres con muchísimas responsabilidades dentro de un ambiente masculinizado y desigual: mantenimiento de la casa, crianza de los hijos, atención al marido, búsqueda de sustento para la familia…

La mayoría de mujeres en la India trabajan y contribuyen a la economía de una forma u otra, pero mucho de su trabajo no se documenta ni se contabiliza en las estadísticas oficiales. Se estima que el 95% de mujeres trabajan en el sector informal de la economía y su trabajo es inseguro, irregular y normalmente no está reconocido. Las mujeres acostumbran a realizar trabajos en el sector agrícola, venta ambulante, oficios tradicionales y el servicio doméstico. En las zonas rurales, ellas representan el 40% de la mano de obra agrícola a causa de la emigración de los maridos a las ciudades.



Sin embargo, a pesar de la feminización de la agricultura india y la incorporación de la mujer al mundo laboral, ésta no goza de ningún tipo de independencia económica. La mujer india debe entregar a su marido los beneficios obtenidos trabajando para que él los administre a su gusto. Históricamente, la sociedad hindú ha considerado que la mujer no podía heredar ni poseer propiedades, por lo que dependía completamente de la benevolencia de su padre o marido. A pesar de que ha habido avances legales sobre la propiedad individual de la mujer, muchas de estas prácticas siguen ejerciéndose en las zonas rurales.




En todos los aspectos de la vida, incluida la educación, se prioriza a los niños frente a las niñas. Dado que la niña será mantenida por otro hombre, su formación resulta innecesaria, y queda relegada a las tareas del hogar. Así, desde pequeña, la niña deberá ayudar a su madre con las tareas domésticas: lavando platos, cuidando a sus hermanos y limpiando. En las profesiones que requieren calificaciones, como los médicos o ingenieros, existe una gran masculinización y las diferencias entre género son evidentes.

La escasa atención a la salud de las mujeres en la India, sobre todo en las zonas rurales, provoca una peor cobertura sanitaria de este colectivo. Desde la infancia, una niña es peor alimentada que un niño. Esto produce altos índices de desnutrición y mortalidad. Además, están obligadas a trabajar en el campo y en el hogar. En muchas ocasiones, las adolescentes se enfrentan a múltiples embarazos cuando su sistema reproductivo todavía no está preparado y no siguen ningún tipo de seguimiento o control médico. Por ello, una de las principales causas de la mortalidad femenina son las complicaciones durante el embarazo y el parto a causa de las anemias, hemorragias, hipertensión, infecciones por falta de higiene y la práctica de abortos en malas condiciones.



Por otro lado, las mujeres no cuentan con ningún tipo de poder ni de derechos dentro de la pareja. Esto les impide controlar sus relaciones sexuales y las sitúa en una posición de mayor vulnerabilidad de contraer infecciones por transmisión sexual como el VIH/SIDA. A menudo, son los hombres quienes toman la mayoría de las decisiones y muchas infecciones ocurren dentro del matrimonio como resultado de las infidelidades del marido. El principal foco de contagio son las grandes ciudades indias donde muchos hombres acuden en busca de trabajo. Allí mantienen relaciones con otras mujeres sin protección. Por otro lado, contraer matrimonio a una edad temprana aumenta el riesgo de infección de muchas jóvenes que se ven obligadas a casarse y a mantener relaciones sexuales. La India es el país del mundo donde existen más casos de personas con VIH/SIDA, con casi seis millones de personas infectadas, de las cuales y, según datos de ONUSIDA (2008), el 39% son mujeres.

Frente a todo ello, es cierto que la India avanza  a nivel legislativo. 
En las últimas décadas se han dado avances y reformas para mejorar la normativa relacionada con la mujer. En este sentido, el gobierno indio ha promulgado varias legislaciones específicas encaminadas a proteger a las mujeres de la discriminación social, la violencia o prevenir los problemas derivados de la consecución de algunas prácticas tradicionales como los matrimonios infantiles, la dote o la violación sexual, etc.

Pero lo más importante es que ELLAS también avanzan.
Os invito a conocer el empoderamiento de la mujer India a través de
·                La Exposición 
 Mujeres, la fuerza de cambio en India. 
De la mano de la Fundación Vicente Ferrer
La fuerza del cambio recorrerá España hasta el mes de diciembre de 2012
·                “La India rural está muy cerca. Allí, el pago de la dote al marido sigue vigente, aunque es ilegal”.
·                “Allí, 50 millones de niñas han desaparecido a causa de los abortos selectivos y los infanticidios femeninos”.
·                “Allí, las mujeres son las principales productoras de alimentos y, sin embargo, en la mayoría de los casos, la propiedad de la tierra continúa estando a nombre de los hombres”.
·                “Allí es donde la Fundación Vicente Ferrer trabaja desde hace más de 40 años”.
La India rural ha llegado de la mano de siete mujeres que participan en el Programa de Desarrollo Integral de la Fundación. Ellas nos cuentan su historia de superación a través de las fotografías de Albert Uriach. Su testimonio está viajando por toda España para difundir un mensaje: el cambio es posible, cada persona es protagonista del cambio. También tú.
Esta exposición está situada dentro de un camión indio que incluye fotografías, maquetas, juegos interactivos… ¡y mucho más!.  
La tendremos en Murcia del 8 al 12 de Noviembre. ¡Disfrutadla!